“Wanda en su cenagal”

Eso es lo que me viene a la mente cada vez que me conecto a las redes sociales para ver las conferencias de prensa de la gobernadora Wanda Vázquez Garced. Confieso que sintonicé la última conferencia de prensa ante la posibilidad de agarrar una buena pegunta periodística tras la reintegración de las ruedas de preguntas. Las veces que ni a la prensa se le permite estar presente opto por divertirme con los comentarios que se generan en Twitter. Pero este escrito no trata sobre la manera en que prefiero recibir la información poco sustentada que Wanda, con su buena dosis de regaños, decide dilucidar en sus conferencias de prensa. El presente escrito trata sobre los antecedentes de la Sra. Vázquez Garced en el servicio público, en momentos en que aboga a capa y espada por su credibilidad ante su reciente referido al Panel del Fiscal Especial Independiente (PFEI).

Un cenagal se define como un terreno lleno de lodo o barro. A su vez, se utiliza para describir una situación o asunto moralmente rechazable. Es, para todos los efectos, un camino que se escoge mediante las acciones de uno mismo. Uno no se adentra en situaciones moralmente rechazables por voluntad de otra persona, sino que se inmersa en ellas tomando decisiones ante la realidad del presente. Entonces, cuando se habla de Wanda en su cenagal, se habla del camino predilecto de ella y el que vemos a su alrededor cada vez que sintonizamos sus conferencias de prensa. Resulta evidente que el camino por el cual transita la gobernadora, lejos de ser llano, le pasa ya los tobillos, las rodillas y no tiene indicios de estabilizar su profundidad.

Fue Wanda Vázquez Garced quien, como secretaria del Departamento de Justicia, engavetó la pesquisa en torno al chat de la famosa Manada Azul de Ricardo Rosselló. Fue también quien le sugirió al entonces secretario de Hacienda, Raúl Maldonado, que no le enviara información necesaria para poder encausar un proceso penal ante indicios de corrupción. Fue esa misma Wanda Vázquez Garced quien tampoco llevó acabo esfuerzo alguno para investigar los escándalos en torno la contratación de Whitefish o el traqueteo con los vagones a través de Unidos por Puerto Rico en el transcurso del manejo de la emergencia tras el paso del huracán María. Vázquez Garced es la misma persona que permitió la apertura de concesionarios de carros en plena pandemia luego de que le enviaran un BMW nuevo de paquete a su esposo, el juez Jorge Díaz Reverón. Esta es la persona que hoy pretende argumentar su inocencia ante el referido al FEI por parte de la ahora exsecretaria de Justicia, Dennise Longo Quiñones Es decir, la señora Vázquez le exigió la renuncia a quien precisamente le comenzó a investigar por actos de alegada corrupción.

En la vida hay caminos que se escogen y hay caminos que se transitan sin opción. Hay caminos que llevan por montes, lomas, bosques, desiertos, manglares y anchos mares. Al cenagal solo llega quien así quiere y así actúa. Las múltiples investigaciones y señalamientos en contra de Wanda Vázquez Garced, junto a su decisión consciente de no actuar y no investigar lo que probablemente han sido algunos de los actos más reprochables en nuestro país, brinda una pista del camino que decidió recorrer Vázquez Garced. Cada cual llegará a sus conclusiones ante la hoja de vida de la gobernadora. En mi caso, y con los hechos de frente, pienso que Wanda camina en su lodazal harta de contentura. Por eso, si algo sorprende, es su frustración visible ante las cámaras cuando palpa que ni su libretista le cree el discurso. Solo basta decir como mi querido viejo: “crea fama y acuéstate a dormir.”

Sobre Francisco Santiago Cintrón

Natural de Guayama, Puerto Rico, Francisco Andrés Santiago Cintrón cursó estudios de ciencias políticas y relaciones laborales para luego completar estudios en la Escuela de Derecho en la Univers