Por Frances Figarela y Ada Ramona

El domingo, 15 de mayo, 30 personas de diversas edades y localización geográfica de Puerto Rico se unieron a la visita de la Hacienda Las Malcriá en Adjuntas. Esta fue la primera visita solidaria de la Red de Economía Social y Solidaria de Puerto Rico  (#ESSPR).

La Hacienda Las Malcría es un espacio tranquilo y lleno de energía para conectarse con uno mismo, con el prójimo y con la naturaleza. Con una vista privilegiada al Lago Garzas y diversos espacios sembrados de café, esta Hacienda es un lugar de relajación y aprendizaje que apuesta al turismo regenerativo.

El turismo regenerativo defiende una forma sostenible de viajar y conocer otros lugares. Su objetivo principal es que los visitantes tengan un impacto positivo en el lugar que visitan. La regeneración es una invitación a ser parte consciente de la co-evolución con la naturaleza y lo que nos rodea. Es un proceso para apoyar que algo se recupere y consiga su estado óptimo nuevamente.

La Hacienda Las Malcriá es un proyecto que fundó Ada Ramona Miranda en el año 2019. Ada fue maestra de Lajas, reconocida en el Aniversario #133 del pueblo de Lajas (2016) por su Gestión en Pro de la Sustentabilidad y el Medio Ambiente. Ada Ramona ha contado con el apoyo de familiares y amistades, quienes han dado la mano voluntariamente realizando trabajo de recogida de café, construcción y realización de mejoras en las áreas de acampar. Además estas personas le han apoyado en la promoción de visitas a Las Malcriá. La Hacienda Las Malcriá es una de las maneras que podemos promover que la tierra produzca de forma sostenible, conservando el suelo y promoviendo la regeneración. La Hacienda cuenta con diversos espacios y ecosistemas donde se pueden realizar recorridos guiados y acampar.

La primera visita coordinada por la Red de Economía Social y Solidaria de Puerto Rico fue una excelente experiencia para los visitantes así como para las personas que forman parte del proyecto solidario Las Malcriá. Los visitantes hicieron un recorrido por diversos ecosistemas que le brindaron energía, espacio para re-conectarse con uno mismo, con el prójimo y con la naturaleza. Las vistas fueron hermosas y contagiaron a todos con los deseos de apreciar la belleza natural de nuestro país y accionar para protegerla. Además, Ada Ramona Miranda ofreció información sobre el proceso de siembra y de crear los espacios para que los visitantes puedan conocer una forma sostenible de hacer turismo. Los visitantes disfrutaron del café de la finca, frutos de la montaña y agua fresca de flor de jamaica. La Red compartió los ocho principios que guían las prácticas de la economía social y solidaria e intercambiamos prácticas que pueden apoyar la conservación y regeneración de los ecosistemas. Además, las personas que nos recibieron en la Hacienda Las Malcriá nos comentan lo importante que fue para ellos esta visita de este grupo tan diverso y a su vez comprometido con la economía social y solidaria.  Dice Ada Ramona que “escuchar a los participantes narrando sus vivencias con los múltiples proyectos solidarios que conocen, desarrollan y lideran fue una oportunidad de valorar lo que ya trabajan en la Hacienda y a su vez de pensar otras posibilidades que no habían visualizado. Para nosotros fue de mucho aprendizaje.”

En fin, esta visita y las interacciones que tuvimos con todas las personas allí presentes nos ofrecieron oportunidad de conocer diversos proyectos, ampliar nuestra esperanza de la otra economía posible y ampliar los vínculos entre personas con iniciativas que promueven el desarrollo sostenible. Este tipo de actividad es muy efectiva para promover el aprendizaje y a su vez promover los proyectos solidarios que existen en Puerto Rico. Invitamos a las y los lectores a comunicarse con la Red ESS, compartir sus iniciativas y proyectos solidarios, enviar información acerca de sus actividades o visitas para divulgarlas en los medios sociales de la Red de manera que más personas los conozcan y contribuyan en su desarrollo.

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