Nota: Este es el último artículo de una serie que incluye dos publicaciones previas en las que, junto al exdirigente nacional, Edwin Rodríguez, examinamos el impacto de las restructuraciones de Major League Baseball en la pelota puertorriqueña.  

Los cambios en el sistema de Ligas Menores de Grandes Ligas, en adición a la dramática reducción en las rondas del sorteo de novatos, plantean la necesidad de una profunda reflexión dirigida a coordinar esfuerzos para fomentar el desarrollo integral de prospectos boricuas.

Durante los pasados dos años, Major Legue Baseball (MLB) ha implementado una nueva filosofía enfocada en reducir costos y dirigir sus recursos hacia aquellos jugadores que realmente cuentan con las herramientas para llegar a Grandes Ligas. La iniciativa del comisionado Rob Manfred representó una reducción de cerca de cuarenta equipos de Ligas Menores y una disminución en la cantidad de partidos en calendario. En términos del sorteo de novatos, la cantidad de rondas pasó de cuarenta a veinte. Estas medidas han elevado el nivel de competitividad de los espacios disponibles para que jóvenes prospectos logren entrar al profesionalismo, al tiempo que jugadores, entrenadores y otras personas vinculadas al béisbol organizado han quedado desempleadas.

“¿Esos cambios (de MLB) van en detrimento de los prospectos de Puerto Rico a Grandes Ligas? Seguro que sí. Pero eso no es culpa de MLB, es culpa nuestra ya que no hemos desarrollado la estructura necesaria aquí, en la isla, que vaya a la par para competir con Estados Unidos y Canadá”, expresó Edwin Rodríguez, exdirigente de Ligas Menores.

Las organizaciones de Grandes Ligas actualmente buscan reclutar peloteros que cuenten con un alto nivel de desarrollo físico, técnico y sicológico. Según Rodríguez, “con esa descripción estamos hablando de peloteros colegiales”. Usualmente, la mayoría de los peloteros seleccionados en el sorteo de novatos provienen de universidades de cuatro años que participan en la División I de la National Collegiate Athletic Association (NCAA, por sus siglas en inglés).

El 66% de los novatos reclamados en el sorteo de 2018 provinieron de universidades de cuatro años, seguido por un 25% de escuela superior y un 9% de instituciones educativas técnicas. El sorteo de 2018 fue la marca más alta de fichajes de universidades de cuatro años desde 2012. De los 612 jugadores escogidos en el sorteo de novatos del 2021, 450 pertenecían a universidades de cuatro años, mientras que solamente 47 pertenecían a instituciones técnicas.

Las becas universitarias para jugar béisbol también se han tornado más competitivas debido a la reducción de equipos de Ligas Menores. Esto ha incrementado la cantidad de jóvenes estadounidenses que optan por instituciones de cuatro años que participan en la División I de la NCAA. En el caso de Puerto Rico, la ausencia de programas de desarrollo a nivel escolar y universitario reduce más las posibilidades de jóvenes para llegar a las Grandes Ligas.

“Sabemos que eso (programas de desarrollo) en Puerto Rico es inexistente. No existe un programa de béisbol en las escuelas superiores como en Estados Unidos y Canadá. Tampoco existe un programa de béisbol en los colegios. La Liga Atlética Interuniversitaria (LAI) sí tiene un torneo, pero es un torneo de ocho o diez juegos por equipo y las facilidades no son comparables a las de las universidades en Estados Unidos”, añadió Rodríguez, quien recientemente culminó su carrera como dirigente en las Ligas Menores.

El propio torneo de béisbol de la LAI ha sufrido una reducción en su participación ante la consolidación de equipos por parte de instituciones universitarias. A su vez, dicho torneo ha cancelado varios partidos durante esta temporada debido a la falta de árbitros. En la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente, el equipo RA12 está realizando un trabajo de desarrollo, pero enfocado en acelerar el progreso de jóvenes que ya firmaron como profesionales.

Contrario otras disciplinas, el desarrollo profesional en el béisbol tiende a ser más lento una vez los jugadores entran al profesionalismo. Desde 1965, solamente veintitrés peloteros han dado el salto directo de escuela superior a las Grandes Ligas. En ese sentido, las alternativas para prospectos boricuas de escuela superior continúan limitándose.

A esta situación se añade la industria de reclutamiento a colegios técnicos en Estados Unidos que luego no cumplen sus compromisos con los jugadores. El Centro de Periodismo Investigativo publicó recientemente un reportaje que describe las falsas promesas de este tipo de instituciones hacia jóvenes peloteros y las dificultades que estos experimentaron durante su estancia en los llamados junior colleges. PRTQ conversó con algunos jóvenes que pasaron por experiencias similares y enfatizaron que además de las dificultades con el idioma, las condiciones de vida como atletas de estas instituciones eran muy difíciles. Este panorama acentúa la necesidad de propiciar respuestas locales para atemperar el béisbol boricua a los cambios de MLB.

“Un programa de desarrollo va más allá de ayudar a que estos muchachos jueguen Grandes Ligas. Un programa de desarrollo para peloteros ayudaría al potencial económico y social de la juventud. Si un programa como ese tiene cincuenta peloteros y diez firman al profesionalismo, pues fantástico. Ahora, a esos otros cuarenta les podríamos conseguir becas para que adquieran grados académicos y puedan ser personas de beneficio a la sociedad a base del béisbol”, señaló Rodríguez.

Los cambios en Grandes Ligas también exigen una mayor preparación y profesionalización para quienes buscan desarrollarse en alguna de las facetas del juego fuera del terreno. Algunas de las áreas profesionales de mayor relevancia para el béisbol actualmente incluyen el manejo y análisis de estadísticas, así como preparación en la parte administrativa del juego.

Se espera que los cambios de formato en MLB continúen durante las próximas temporadas. Durante la pasada campaña el sistema de Ligas Menores se utilizó para experimentar medidas como la automatización de la zona de strikes y alargar la distancia entre la loma y el plato. El comisionado Manfred también ha expresado su interés en internacionalizar el béisbol y acelerar la inserción de la industria de MLB en los patrones de globalización.

Sobre Mikael Rosa Rosa

Mikael E. Rosa Rosa realizó un bachillerato en ciencia política con una segunda concentración en periodismo. Posteriormente completó una maestría en trabajo social comunitario, ambos grados los