Toro Negro: una comunidad reconstruida por sus luchas
por Amanda Colón Nieves
La Comunidad Toro Negro, ubicada en el pueblo de Ciales, está rodeada de abundante naturaleza donde se puede encontrar desde animales de finca como vacas, bueyes y gallinas, hasta animales exóticos como llamas y avestruces en el patio de algún vecino. También cuenta con enormes cuerdas de terreno en las que residentes cosechan desde mandarinas y maíz hasta cacao. Son los mismos residentes de la comunidad quienes se han encargado de embellecer el rinconcito escondido de una sola calle del pueblo de Ciales, con la creación de jardines floridos, rótulos personalizados y atractivos. La Comunidad Toro Negro es a simple vista un lugar hermoso, pero cada detalle de esta comunidad viene a raíz de incansables luchas de parte de los residentes.
Toro Negro cuenta con una calle donde solo residen 60 familias que, gracias a la autogestión y el apoyo de su líder comunitario José “Tito” Figueroa Pesquera, entre otros, han podido llevar a cabo varios proyectos que han mejorado su calidad de vida. Por muchos años la comunidad exigió los servicios de agua potable, servicio de correo postal, recogido de basura y una cancha bajo techo para el ocio y disfrute de niños y familias. Algunos reclamos se conquistaron mediante la autogestión y otros por efectos de la Ley del Fideicomiso Perpetuo para las Comunidades Especiales, aprobada el 21 de noviembre del 2002.
Antes de que se creara el proyecto del Fideicomiso, los vecinos obtenían agua de un manantial, buscaban sus cartas afuera de la comunidad y tuvieron que crear sus propios contenedores de basura para mantener los alrededores limpios.
Tito Figueroa, quien llegó a esta área hace 28 años, narra las dificultades que sus vecinos y él pasaban para llegar a sus viviendas. Los residentes debían pasar por el río y un camino rocoso para salir o entrar a sus hogares. El primer proyecto de esta comunidad fue la construcción de dos losetas de cemento que cruzan el Río Toro Negro, para permitir el paso de vehículos de motor con más facilidad. La implantación de estas losetas se realizó en el 2002 con la ayuda del Municipio de Ciales, el Municipio de Orocovis y los mismos residentes de la comunidad. Antes de las losas de cemento, los residentes estuvieron luchando para que se asfaltara y se creara un puente que diera acceso a la Comunidad desde la carretera ya que, además de pasar por el río, los residentes debían pasar por un camino de tierra y piedras para llegar a sus hogares. No fue hasta el 2006 que finalmente se construye un puente con acceso directo a esta comunidad.
Dos puentes de hamaca permiten la llegada de los residentes cuando el Río Toro Negro está crecido. La idea de construir los puentes colgantes vino a partir de un viaje que hizo Figueroa a Costa Rica donde vio por primera vez ese tipo de plataformas. El concepto fue llevado ante la Junta de la Comunidad Toro Negro donde Tito es presidente, y fue apoyado por sus vecinos. El primer puente de hamaca se construyó en el patio de uno de los residentes, Carmelo Burgos Rivera , quien aceptó la idea y comenzó la construcción. Todos los habitantes utilizan estos puentes y consideran que es una manera segura y accesible de entrar y salir de la comunidad cada vez que tienen alguna emergencia.
En momentos de crisis, son los mismos residentes quienes se ayudan unos a otros para que el efecto de los fenómenos climatológicos no genere tanto impacto negativo en la Comunidad Toro Negro. Muchas veces, sin la ayuda del municipio.
En agosto del 2015, la Junta de la Comunidad Toro Negro presentó un proyecto llamado “Plan para Manejar Situación del Río Toro Negro en Áreas de Impacto Humano”, donde se presentaron varios puntos para el cuidado y uso del cuerpo de agua. Gracias a ese proyecto, los residentes lograron que la policía de Puerto Rico, policías municipales y el Departamento de Recursos Naturales movilizaran a sus agentes para la vigilancia del Río Toro Negro este verano, de modo que haya más control de las personas que dejan sus vehículos de motor estacionados dentro o cerca del cuerpo de agua.
“Nosotros lo que queremos con este proyecto es crear conciencia a estas personas para que mantengan el área limpia, respeten nuestros hogares y que protejan el medio ambiente”, declaró el líder comunitario. En el pasado, durante los veranos, miles de personas visitaban el Río Toro Negro y estacionaban sus carros dentro del cuerpo de agua, bloqueando la entrada a las viviendas. Además, dejaban una gran cantidad de basura alrededor e inclusive, en ocasiones, los residentes se encontraban con heces fecales en sus propios patios, recordó Figueroa.
Para los habitantes de esta comunidad es imprescindible el cuidado y uso del Río Toro Negro, por lo cual han estado exigiendo respuestas en base al Proyecto del Senado 1506 titulado “Ley para la Conservación, el Desarrollo y Uso de los Recursos de Agua de Puerto Rico”. El proyecto tiene como fin establecer la nueva política pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico respecto al recurso agua. Los residentes están a la espera de las vistas públicas de este proyecto.
La comunidad de Toro Negro es protagonista de las más diversas formas de acción social y solidaridad. Tito, junto a otros vecinos, han estado ofreciendo talleres educativos a jóvenes sobre agricultura. Durante el mes de abril tuvieron la visita de un grupo de estudiantes de una escuela intermedia del estado de Vermont quienes aprendieron cómo arar la tierra con bueyes y tomaron talleres sobre el cultivo del cacao y extracción del chocolate. La comunidad tiene como meta educar a jóvenes sobre la importancia del medio ambiente para fomentar un nuevo liderato en esta y otras comunidades.
Entre sus proyectos futuros se encuentra la creación de una página electrónica para mostrar al pueblo los logros y cambios de la comunidad y concienciar sobre la importancia del cuidado y respeto del medio ambiente. Nada de lo que han obtenido mediante sus luchas será en vano y aseguran seguir trabajando junto a su líder comunitario, pues su meta es poder crear de Toro Negro una comunidad segura para ellos y futuras generaciones.
La autora es estudiante de Periodismo de la Escuela de Comunicación, Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico. Forma parte del curso de Redacción que colabora con el Seminario sobre Periodismo Comunitario que coordina el profesor Luis Fernando Coss.
Sobre PRTQ-UPR
Los autores bajo esta firma son estudiantes del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico vinculados al seminario sobre "periodismo comunitario" que imparte el profesor Luis Fernando C
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