Hace más de un año pronostiqué algo que muchos consideraron exagerado y fuera de proporción. Nada más y nada menos que una nueva fuerza política llamada Victoria Ciudadana, podía ganar las elecciones del 2020.

De allá para acá esa colectividad se inscribió y nominó 132 candidaturas a las posiciones más importantes del país, menos la mayoría de las alcaldías, donde prefirió solamente postular cinco. Estas presentan un equipo completo de asambleístas municipales, incluyendo la capital del país, con uno de sus principales figuras.

A una semana de las elecciones todas las encuestas, reconocen que Victoria Ciudadana es la tercera fuerza que sigue creciendo, mientras la partidocracia PNP-PPD continúa descendiendo. Solamente una encuesta -de muy dudosa credibilidad- alega lo contrario, inflando como por arte de magia al PIP, a su conveniencia.

¿Cuál es la realidad del nuevo fenómeno electoral de Victoria Ciudadana y su verdadero apoyo hoy?

Si ponemos oído en tierra, nos damos cuenta de varias tendencias. Estas son avaladas por decenas de miles de electores, que expresan sus preferencias en sondeos por teléfono, en vez de las mil llamadas de las muy bien pagadas encuestadoras al servicio del PNP-PPD.

Primera tendencia: Victoria Ciudadana ganaría las elecciones si solo votaran los sectores de 18 a 55 años, porque sus portavoces tienen un respaldo mayoritario entre esas edades. Hasta un programa político de televisión en un sondeo con más de 30 mil participantes, informó con las muelas de atrás, que Alexandra Lúgaro ganó con el 32%. ¡Que extraño este resultado!, dijeron preocupados y sin sonrojarse.

Segunda tendencia: El candidato a la alcaldía de San Juan por Victoria Ciudadana, Manuel Natal, está en segundo lugar pero acercándose cada vez más al líder del PNP que botó miles de trabajadores, quedándose atrás la inconsistente legisladora del PPD. Algunas encuestas inflan la cantidad de llamados indecisos para curarse en salud.

Tercera tendencia: Es evidente que la calle es de Victoria Ciudadana, por el entusiasmo de su membresía y sus candidaturas, que se proyectan con gran vitalidad en las visitas casa por casa y en las plazas públicas de todo el país. Mientras tanto, las caravanas de la partidocracia saludan de lejos como siempre y entonan sus aburridas cancioncitas politiqueras. La falta de identificación del pueblo con el mismo sonsonete es entendible.

Luego de definir estas tres tendencias, procedo a describir la proyección que estimo más cercana a nuestra realidad, poco antes de las elecciones 2020.

Primero proyección: Victoria Ciudadana ya supera el 25% del voto para la Gobernación y la Alcaldía de San Juan, colocándose a las puertas de un triunfo electoral, sin precedentes en nuestra historia, como fue la sorpresiva expulsión de Rosello II, en el verano del 2019.

Segunda proyección: Las elecciones están muy cerradas, pero se trata de tres fuerzas y el resultado final hoy es impredecible. Por eso, la escalada en las campañas del PPD-PNP de asesinato de reputación contra el liderato de Victoria Ciudadana. La narrativa manipulada de que solamente existen dos fuerzas mayoritarias PPD-PNP se implementa y se repite.

Tercera proyección: Este pueblo cambió para siempre, sobre todo por la burda e insolente corrupción de la partidocracia PNP-PPD y se apresta a darle una gran sorpresa electoral, castigándolos con una avalancha de votos por Victoria Ciudadana.

Conclusión: ¡“La vida te da sorpresas”! Tiempo al tiempo, que el martes 3 de noviembre está a la vuelta de la esquina.

Sobre José 'Papo' Coss