Hasta la tarde del miércoles, el nombre de Luis Daniel Muñiz no me era familiar, pero ya no se me va a olvidar. Merece reconocimiento y respeto por ser el primer legislador de la mayoría en reconocer que la gobernadora Wanda Vázquez, José Ortiz y la Junta de Control Fiscal lo que piden es atropellar al pueblo. Eso es lo que representa la aprobación del “Restructuring Support Agreement” con los bonistas de la Autoridad de Energía Eléctrica, una medida a favor de quienes ya se han enriquecido demasiado a cuenta nuestra.

¿Habrá más legisladores y legisladoras con suficientes agallas para irle en contra a su partido en defensa de los intereses del país?

El acuerdo con los bonistas de la Autoridad de Energía Eléctrica, como el que se hizo con los de COFINA, es producto de una negociación fatula: de un lado, los intereses financieros, tienen abogados suficientes para aplastar cualquier oposición; del otro, supuestamente defendiendo el interés del pueblo de Puerto Rico, están la Junta de Control Fiscal y el gobierno electo. Ya hemos visto con cuánto empeño nos ayudan cuando solo se trata de sacar suministros de un almacén; menos tendrán, para oponerse a quienes les pueden prestar más en el futuro… Para que paguemos nosotros, por supuesto. Nosotros, y las generaciones que vendrán.

Ese acuerdo nos sentenciará a décadas de pagar la luz más cara, y será otro escollo más para desarrollar nuestra economía y lograr una red energética resistente y sostenible tanto ambiental como económicamente. Junto con el de COFINA, probablemente nos lleve nuevamente al impago en unos pocos años.

El año pasado la legislatura aprobó el acuerdo de COFINA de noche, de espaldas al pueblo. Probablemente traten de hacer lo mismo con este otro de la AEE en las próximas semanas.

Este acuerdo requiere la aprobación de la Legislatura. Puerto Rico necesita que más miembros de nuestra Legislatura sigan el ejemplo del senador Muñiz, y pongan nuestro futuro primero que los intereses financieros, y voten NO para exigir un acuerdo mejor.

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