En los pasados días hemos visto el descontento y la desconfianza del pueblo en el “Gobierno de Puerto Rico” para atender la emergencia provocada por los sismos. El mensaje y campaña que retumba en todos los sectores es: “No le entregues suministros al Gobierno”. Nos bastó con la experiencia del huracán María. Ver lo negligente que fue el “Gobierno” con el manejo de los suministros y que aún sigan sin considerarse como actos criminales es inaceptable.

Nuestra gente murió, se nos fueron del país, pasaron necesidades y continúan sufriendo por los efectos del paso del huracán María.  Pero me pregunto, ¿de quién es la culpa de la desconfianza? ¿La culpa es del Gobierno o la culpa es de quien administra a nuestro Gobierno?

Hace varios años tomé un curso Administración Pública en la Universidad de Puerto Rico con el exsecretario de educación -el Profesor Cesar Rey Hernández-.  En el curso marcábamos la diferencia entre el Gobierno y el partido político que lo administra. El Gobierno es la forma en que los ciudadanos se organizan para poner en manos de unos adiestradores, los recursos productos de las contribuciones con el fin de hacer proyectos para el bien común. De otro lado, están quienes administran el Gobierno, cuya procedencia son los partidos políticos que cada cuatro años escogemos en las urnas.

Habiendo marcado esa diferencia,  debemos adjudicar las culpas de la debacle a los partidos políticos que han administrado nuestro Gobierno -con Estados Unidos como cómplice-. Los culpables son el Partido Nuevo Progresista y el Partido Popular Democrático. Esos partidos son quienes han administrado y quienes  son los culpables de la desconfianza en nuestro Gobierno.

Ya es hora de cambiar nuestras formas de elegir a quienes administran el Gobierno. Necesitamos administradores que amen más a nuestro país y nuestra gente. Necesitamos a administradores que no escondan suministros, que no nieguen servicios y que trabajen para sacar a Puerto Rico de la crisis económica y humanitaria. Es hora de escoger nuevas opciones y gente nueva que lleven a nuestro país al progreso con una administración justa y efectiva. Esto sin dejar de organizarnos como pueblo, para fiscalizar a esos que pondremos en la administración. Y si no hacen el trabajo, vendrán más veranos 2019.

El autor es Trabajador Social Comunitario y candidato a la legislatura municipal de San Juan por el Movimiento Victoria Ciudadana

Sobre Joel Vázquez Rosario