El Fideicomiso para el Desarrollo de Río Piedras, el Centro para la Reconstrucción de Hábitat y el Municipio de San Juan comenzaron un censo de estructuras abandonadas en el casco urbano de Río Piedras, a partir del cual auscultarán posibles proyectos para su reutilización.

La alianza de estas tres entidades contó con el apoyo del Centro para la Acción Urbana, Comunitaria y Empresarial (CAUCE) y la Junta Comunitaria del Centro para concretizar el inventario de propiedades. Por su parte, la Fundación Segarra Boerman, el Center for Community Progress y Citi Community Investigating and Development auspiciaron la realización del inventario. Esta iniciativa surge debido a un reclamo comunitario para que se atienda la situación de las estructuras en desuso ante las problemáticas que representan para los residentes.
“Los edificios y espacios abandonados son un potencial problema ambiental y social que fomenta los vertederos clandestinos, criaderos de mosquitos, y vandalismo, entre otros riesgos”, expresó Omar Cuadrado Santana, directo ejecutivo del Fideicomiso para el Desarrollo de Río Piedras.
El Centro para la Reconstrucción de Hábitat y el Fideicomiso para el Desarrollo de Río Piedras circularon una comunicación escrita en la que destacan que el 44.4% de las viviendas ubicadas en esa área riopedrense están abandonadas. En términos porcentuales, esa cifra duplica la cantidad de viviendas abandonadas en Puerto Rico, y casi cuadruplica la cantidad actual en Estados Unidos.
“Con este proyecto comunitario buscamos recopilar información y medir los riesgos de salud y seguridad que representan estos estorbos para la comunidad. La declaración de estas propiedades como estorbo público será trabajada en conjunto con el Municipio de San Juan para canalizar qué propiedades pueden ser usadas para desarrollo comunitario, con énfasis en vivienda asequible”, mencionó Luis Gallardo, director ejecutivo del Centro para la Reconstrucción del Hábitat.
Para finales de este mes se presentará la información recopilada a la Junta Comunitaria de Río Piedras y luego al público en general. La segunda parte de los trabajos será levantar inventario sobre las otras comunidades de Río Piedras y realizar las investigaciones legales, contributivas y de campo sobre los paraderos de los titulares de cada propiedad abandonada. Los titulares que comparezcan tendrán la oportunidad de establecer un plan de trabajo con el ayuntamiento. En los casos que los dueños no comparezcan o no existan, la comunidad y el Fideicomiso trabajarán una propuesta para la reutilización de esos espacios.

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